lunes, 5 de noviembre de 2012

Recuentos del mes 11

¿La escuela? No me deja dormir, ni tener amigos, ni irme de campamento, ni ir a Teatro, ni pensar casi en otras cosas. Pero de a poco me voy liberando, como si fueran prendas de ropa pesada por la lluvia que trae encima, y día tras día saco los abrigos más gruesos y queda cada vez menos. Cada vez más cerca del colapso de histeria, pero cada vez más cerca de esquivarlo, si aún puedo. Y aún puedo.

¿Le  cœur? Acá andamos, soplando fuerte, fuerte, ¡muy fuerte! para intentar remontar a vuelo un barrilete que a veces en vez de alambres de cobre, pareciera tener en su estructura cañas de plomo. Pero tiene tan lindos colores, y ¡qué lindo es verlo volar cuando hay sol! Aún se puede hacer algo. Y por estos pagos se está intentando hacerlo.

¿De fiuchah? Irme a Buenos Aires dejó de parecerme la mejor idea del mundo hace unos días. Pero lo voy a hacer igual, aunque sea para probar suerte un año. Quién te dice, capaz juego a ser plomero de gorra roja y recolecto muchas moneditas de oro para irme a Europa. Ibiza es tentador, me contaron que es una sociedad muy heterogénea donde nadie juzga a nadie y mientras más diverso, mejor. Ser aceptada es tentador. Encontrar mi lugar en el mundo es tentador. Voy a hacer del mundo mi lugar.

No hay comentarios: